Publicidad y otros males de nuestro tiempo

Decía Henry Ford que si le quedara un solo dólar, lo invertiría en publicidad. Acá siempre chocó un poco esa idea, porque para el software no existen líneas de montaje, y la publicidad trae más trabajo que a su vez requiere más mano de obra calificada, que es lo que justamente es más difícil de conseguir.

Con los años lo que hemos conseguido es un buen equilibrio entre cantidad de clientes y calidad de clientes. Los buenos clientes siempre son buenas personas, y estar rodeados de buenas personas hace el trabajo más agradable y fructífero. Es curioso, porque nosotros trabajamos generalmente con empresas, pero naturalmente en las empresas trabajan personas, que son a las que nos referimos.

Generalmente no hacemos publicidad, y la poca que tenemos no es porque la quisimos, sino que resultó ser por canjes y otras yerbas, así que cada tanto aparecemos en la radio, en un semanario local y una vez hasta en la TV, además de en varios sitios web. Ahora y casi casi por los mismos motivos, tenemos un banner estático para marcar nuestra presencia en los lugares a los que vayamos... y nos dejen ponerlo.

Sin embargo, en estos 15 años de trabajo, solo pudimos constatar 2 o 3 negocios concretados de gente que se acercó por la publicidad. Aún así tenemos mucho trabajo y a veces tenemos que "dar turno" para empezar trabajos nuevos semanas adelante.

Nos es nada nuevo, pero resulta ser que nuestra seriedad, honestidad y la calidad de nuestro trabajo, son la mejor cosa que se puede hacer para conseguir clientes.